Para desestresar del poker hace un tiempo que juego a World
of Tanks. Un juego online de estrategia y juego en equipo que básicamente trata
de ir con un tanque por esos mundos de dios pegándole cañonazos a los del
equipo enemigo.
La verdad es que el juego en sí está bien, pero como en
todas partes hay chat. Y parece que los chats atraen a tarugos. Parece mentira
que no hay lugar en internet donde el anonimato no alente a cuatro niñatos a
dejar patente su ignorancia y poca educación. Por no hablar del foro, donde la
gente habla de sus estadísticas como si de algo importante se tratara. Y ojo, ¡que
en este juego no te juegas el dinero! (valga la redundancia).
El otro día en televisión les preguntaban a unos jóvenes
sobre Argentina, y ni sabían situarla en el mapa, ni aún menos sabían cual era
su capital. Veo claro que las reformas educativas de los últimos tiempos han
ido destinadas básicamente a aborregar y a analfabetizar a la gente. Solo así
se entiende que en este país tengamos los políticos que tenemos y los
aguantemos sin quejarnos más allá de las tertulias del bar.
Jugué una liga inglesa de poker y daba gusto el ambiente
entre los participantes. En una liga portuguesa lo mismo. Aquí, aparte de las
de Tusbonos donde todos nos conocemos, parece que vivamos en un país donde la
envidia, la rabia, o la ignorancia guíen a algunos a ponerse en evidencia. Con
lo bien que se vive sin tener el trabajo de odiar a los demás.
Niños, hay que tomarse la vida con calma. A veces, cuanto
más sencillas son las cosas, mejores son.
No. Este post no va de mi última proeza sexual. Ni de ninguna otra guarrería que tenga que ver con el cuerpo humano.
Últimamente
no juego al poker. Me cansa. Eso de perder horas y tener que luchar tanto por
los premios que se ofrecen hoy en día no me motiva. De ello se resiente mi
blog, como no.
Pensaba
dedicar estas hora que he ganado a tener sexo con mi mujer, pero no ha sido
posible. Dice que como ya estamos casados y no queremos tener más hijos, ya no
hace falta que tengamos sexo. Dice que es ley de vida. Pero que como aún me
quiere mucho, si soy bueno y no la hago enfadar, de vez en cuando puede que se
anime a hacer alguna guarrería.
No
quiero entrar ahora en los detalles de todo ello, pero el no tener tiempo para
nada influye y mucho en tus prioridades a la hora de repartir tu tiempo. Y esto
es lo que me pasa a mí. Que ahora mismo mis intereses se centran en otras cosas
que no son el poker.
Con una
família numerosa, el dinero extra nunca viene mal, así que he encontrado una
alternativa al poker. Plus500. Inversiones online en tiempo real. El programa
te permite invertir en diferentes bolsas, en materia primas, divisas o lo que
se te ocurra, con actualizaciones casi instantáneas. Además te permite
gestionar tus compras o ventas automáticamente, por ejemplo vender un activo
cuando llegue a cierto valor.
Es
una forma de no perder tiempo y de ganar dinero (con un poco de criterio y otro
poco de suerte).
Además
Plus500 te regala los primeros 25€ al abrir una cuenta para que lo pruebes. Si
tienes un bank saneado, nunca viene mal diversificar y poner a trabajar el
dinero que no usas.
No es
como practicar sexo, pero al menos no usarás el ordenador solo para el
facebook, el poker y el porno.
Si
quieres probar, puedes darle al banner de abajo o al de al lado. Mis hijos te
lo agradecerán.
Este artículo es un pequeño homenaje a mí mismo. No por ser sexy, que lo soy. Ni por ninguna de mis otras legendarias y abundantes virtudes. El motivo es que repasando mi blog he comprobado que mi artículo más leído lo escribí hace más de dos años y aún hoy sigue entrando gente a comentar.
El artículo en cuestión es CUANDO LA MANIPULACIÓN EXISTE, y creo que cuanto más tiempo pasa, más convencido estoy de que el poker online está manipulado. Así que voy a regodearme en mi tema estrella una vez más.
Las .es han puesto otra piedra enorme en el lado de la balanza que me hace creer en la no limpieza de las salas. Precisamente el que “gracias” a la nueva legalización del poker y el cierre de fronteras haya salas que están muriendo por falta de “clientes”, es un factor que propicia la tentación de jugar sucio.
Lo voy a explicar de forma que lo entendamos todos.
En una sala hay doscientos jugadores. 10 son jugadores buenos, y el resto malos malísimos.
Dos de ellos, uno bueno y uno malo están jugando un HU. EL bueno recibe AA y el malo JQs. El bueno va allin preflop y el malo como son figuras y suited no puede resistir hacer call. El calculador de odds nos dice que es un 80%-20%.
Si este tipo de jugadas se repite a menudo podemos afirmar que en muy poco tiempo los 10 buenos van a desplumar a los 190 malos. La sala habrá cobrado un rake modesto, perderá a 190 jugadores y los 10 que han ganado dinero de verdad se irán con su dinero a otro sitio donde haya más peces. O sea, que la sala tiene que cerrar.
¿Qué pasa si la sala quiere ganar más dinero y que los jugadores no se vayan?
Pues necesita que los jugadores buenos no desplumen a los malos. Al menos no tan rápidamente. Si el bueno gana pero le cuesta el triple de manos ganar lo mismo, el rake sube y la sala gana más. Para la sala lo ideal sería convertir este 80%-20% en un 50%-50%.
Hace mucho tiempo que los 80-20 no son 80-20, y mucho me temo que actualmente están más cerca del 50-50 que del 80-20. Al menos mi HM así lo dice.
Seguro que algunos diréis que esto no es cierto. Tenéis tanta razón y tantas pruebas como yo.
La lástima de todo ello es que el estado que no ha perdido ni un segundo en legalizar el poker para recaudar, no haya instaurado una serie de controles de calidad en el software de las salas de poker.
Para abrir un restaurante ni os imagináis la cantidad de requisitos y controles que se tienen que pasar. En cambio el negocio del poker, nadie nos garantiza que no nos estafen.
En un país de políticos corruptos, de evasores de impuestos, de egoístas y de manguis, donde el panorama invita a no confiar ni en tu madre, parece que hay que confiar en las empresas que nos ofrecen poker online. Y eso que existen precedentes de salas pilladas en trampas peores que el retocar un par de puntos los tantos por ciento.
Yo no confío en ellas. Sigo creyendo que el jugador bueno sigue ganando, ¿pero a costa de qué rake?
Motociclismo y sexo. Llevo 4 o 5 años jugando al poker y ya llevo un tiempo en que me cansa.
Ir en moto o follar no lo han hecho nunca. Es más, me bajo de la moto o de mi mujer y ya estoy pensando en la próxima vez.
Pocas cosas en la vida te producen esa sensación. Jugar al poker a veces te produce la sensación contraria. No quieres volver a ver un tapete nunca más.
Hay diferencias de todo tipo, pero una de ellas es que en los dos primeros casos tienes una compañera que te da lo que le pides, y en el poker tienes a unos cuantos frikis que lo que quieren es joderte bien, pero en el mal sentido.
Ya decía mi madre que las compañías hay que cuidarlas. Si te juntas con cabronazos, te harán cabronadas. Por eso puestos a juntarse, mejor hacerlo con algo que tenga tetas o en su defecto, algo potente y que no replique.
A lo largo de la vida se pasan fases, y lo que en un momento dado puede ser importante, viéndolo mas adelante con cierta distancia te puede resultar una nadería. Por eso creo que lo mejor es seguir el consejo que me dio mi padre, de que en esta vida de lo que se trata es de vivir tranquilo y no preocuparse demasiado, él decía que así se vivía mas tiempo, que en paz descanse.
Si te petan ases tienes un pequeño problema, pero si te representa un problema que te peten ases, tu problema es mayor. Por eso, sigue mi consejo, que no es otro que el practicar sexo todo lo que puedas. No se si vivirás mas, pero te lo pasarás de miedo.
He estado mucho tiempo fuera. Llevo un par de meses en los que he viajado por medio mundo. He estado en el Tibet y en Las Vegas. En Tanzania y Moscú. He estado con Bill Gates y con tribus del amazonas. He tomado setas alucinógenas y he probado la abstención sexual. He desnudado mi alma y he visto mas allá de la consciencia humana. Y aún así sigo siendo un ignorante.
Preguntas sin respuesta que te obligan a emprender un viaje de búsqueda. ¿Porqué las salas puede que no estén rigged? ¿hay algún motivo para que no lo estén? ¿Porqué los hay tan crédulos para dar por sentado que la varianza les puede joder durante un millón de manos y en cambio las salas no pueden estar trucadas? ¿Será que una cosa entra dentro de las posibilidades y la otra no?
Ante tanta desazón, lo dejé todo. Metí un par de tejanos y el pasaporte en una mochila y me pasé por el banco a retirar unos dinerillos. Primer destino, el Tibet. Para empezar una búsqueda de tal magnitud, nada mejor que empezar por tomarse unas birras con el Dalai Lama. Después de un increíble viaje en autoestop donde aprendí que si en un skoda con más de 30 años pueden caber más de 15 personas, es posible que en el river te salga el único out que te falta tres veces seguidas, llegué al palacio Potala. Para enterarme que el Dalai Lama ya no vive en el Tibet. Es lo que tiene no estar muy al tanto de las cosas del mundo. Ya lo dice mi mujer que si dedicara mas tiempo a pensar en cosas de provecho en vez de en sexo, las cosas me irían de otra forma. Pero es que a mí el sexo me aprovecha mucho. Y la verdad, a mí me gustan los orgasmos por la vía rápida.
Total, que con esto aprendí que a veces las cosas no son como las esperas. Así que me bajé a la India que queda ahí al lado. Un gurú de esos que llevan un punto en la frente me habló del sentido de la vida y de que debemos buscar tanto la pureza del alma como del cuerpo. Me dijo que donde hay pureza, hay bondad y felicidad. Me imaginé al instante lo pura que debe tener la mente un programador de software de poker. Y ya no digamos el cuerpo. Las salas quieren rake y si al jugador bueno le cuesta más ganar y al malo perder, eso no cambia que al final uno gane y el otro pierda, pero la sala recibe más rake. Menos mal que la pureza de los programadores impide que las salas puedan tener lo que quieren.
De allí me fui a la Meca, donde un Imám me habló de los misterios de la fe. El hecho de creer en algo, llamémosle fuerza superior, hace que le encontremos sentido a cosas a las que no encontramos explicación. El hecho de tener fe puede ser algo que nos ayude en nuestra vida. Pero un efecto secundario es que si nuestra fe tambalea puede hacer que nuestro mundo se desmorone. Quizá por eso algunos jugadores no quieren ni oír hablar de que las salas están quizá levemente trucadas.
Mi paso por África fue breve, puesto que la mayoría de personas viven con lo que pueden y no albergan pensamientos negativos. Allí una persona como yo, con tantas inquietudes no pega mucho. Pero de la candidez de algunos pueblos africanos se puede extraer una gran lección, y no es otra que la de tomar las cosas como vengan. Que las salas están trucadas no importa, son iguales para todos (excepto para las cuentas se superusuario), y aunque alguna sala hayan cerrado por hacer trampas, eso no quiere decir que las demás tengan porqué hacerlas.
Dejar como anécdota que estando en un país africano conflictivo pude ver como se entrenaba a unos niños en el uso de las armas. Me pareció mal que se les instruya en la agresividad desconociendo aún la mayor parte de lo que la vida puede ofrecer. Las escuelas están bien si enseñan a desenvolverte en la vida. Si te convierten en un psicópata, no.
En muchos sitios donde estuve, desde jugadores de poker hasta filósofos me dijeron que muchas de las respuestas de la vida se consiguen con la simple observación. Hay que tener los ojos abiertos. Y al preguntarles yo sobre la comparación, me dijeron que obviamente si hay con qué comparar, la observación aún nos nutre de más información. Ya que como me dijo un amigo mongol, vivir siempre en el mismo sitio es despreciar el resto de la creación.
Así que con estas directrices llegué a la conclusión que un jugador de cash que ha hecho miles de millones de manos en una misma sala pero no ha hecho ninguna en otra sala ve su calidad de apreciación distorsionada por la costumbre. Vive en su mundo al que se ha acostumbrado después de tantas manos, y que se le ha vuelto rentable, o coincidencia, después de mejorar su agresividad.
Quizá mi viaje errante y recurrente por decenas de salas me ha permitido asistir a fenómenos propios de cada una. Desde la que te reparte dos pokeres por hora, hasta la que saca las cartas del board con el mismo ritmo, excepto algunas veces que en el turn hace una pausa mas larga de lo habitual, como creando expectación, para sacar un riverazo. Cosas insignificantes que son distintivas de cada sala y con distintivas quiero decir que no tienen las demás. ¿Esto prueba que las salas están trucadas? No, pero prueba que los softwares son diferentes. ¿Y pueden ser dos softwares diferentes y no estar trucados? O mejor ¿pueden ser dos softwares diferentes y decir que es lo mismo en cuanto a posibilidades que el juego en vivo?
Se puede pensar que estás en lo cierto, pero un argentino me dijo que la intransigencia es una forma de estupidez.
Al pasar por Nueva York, tuve la ocasión de ir a una gala benéfica y alternar con personajes poderosos. Me quedó bastante claro que el dinero es lo más importante para algunos, y también que es adictivo. Los que tienen mucho quieren más. Les pregunté a algunos qué harían si se quedaran sin un céntimo. Y la respuesta de todos ellos fue empezar de nuevo a ganar dinero. Y cuando les pregunté si alguna vez habían hecho algo reprobable para ganar dinero o pisarían a alguien para hacerlo, se echaron a reír. En los negocios no hay sentimientos y se hace lo que se tiene que hacer, me dijeron. Que cada cual saque sus conclusiones.
Total, que después de muchas vivencias, y de hablar con eruditos, tontos e iluminados, he vuelto de mi viaje igual que como lo empecé. Sigo pensando que el sexo no está rigged y si lo está aún mejor, pero sigo sin saber si el poker online está trucado. Yo creo que sí y mientras no me demuestren lo contrario, así seguiré pensando. Con eso no quiero decir que no se deba jugar al poker online, sino que hay que conocer lo que hay para después no lamentarse y poder disfrutar de una cosa que debe ser para disfrutar y no para cogerse cabreos.
El encuentro mas curioso que tuve fue en Colombia. Allí conocí a un hombre que decía ser Juan Ponce de León. El español que en 1513 encabezó una expedición para buscar la fuente de la eterna juventud. Me contó que finalmente la encontró. Yo no estaba para nada convencido de ello y le exigí que me lo probara. Me dijo si el verlo delante de mí 500 años después no era suficiente prueba.
Quizá si yo fuera de los que se cree lo que le dicen lo habría creído, pero tampoco había forma posible de probar que ese señor fuera Ponce de León. Así que descubrí que fuera o no verdad y exactamente igual que la base de una religión, las mejores mentiras son las que nadie puede probar.
