11.12.2013

ASÍ ESTAN LAS COSAS


Para desestresar del poker hace un tiempo que juego a World of Tanks. Un juego online de estrategia y juego en equipo que básicamente trata de ir con un tanque por esos mundos de dios pegándole cañonazos a los del equipo enemigo.

La verdad es que el juego en sí está bien, pero como en todas partes hay chat. Y parece que los chats atraen a tarugos. Parece mentira que no hay lugar en internet donde el anonimato no alente a cuatro niñatos a dejar patente su ignorancia y poca educación. Por no hablar del foro, donde la gente habla de sus estadísticas como si de algo importante se tratara. Y ojo, ¡que en este juego no te juegas el dinero! (valga la redundancia).

El otro día en televisión les preguntaban a unos jóvenes sobre Argentina, y ni sabían situarla en el mapa, ni aún menos sabían cual era su capital. Veo claro que las reformas educativas de los últimos tiempos han ido destinadas básicamente a aborregar y a analfabetizar a la gente. Solo así se entiende que en este país tengamos los políticos que tenemos y los aguantemos sin quejarnos más allá de las tertulias del bar.

Jugué una liga inglesa de poker y daba gusto el ambiente entre los participantes. En una liga portuguesa lo mismo. Aquí, aparte de las de Tusbonos donde todos nos conocemos, parece que vivamos en un país donde la envidia, la rabia, o la ignorancia guíen a algunos a ponerse en evidencia. Con lo bien que se vive sin tener el trabajo de odiar a los demás.

Niños, hay que tomarse la vida con calma. A veces, cuanto más sencillas son las cosas, mejores son.